La historia de Osvaldo, un vecino de Córdoba de 56 años, dio un giro el pasado domingo, cuando fue trasplantado. Después de vivir con un diagnóstico cardíaco por 26 años, su situación se había vuelto crítica. El hombre se mantuvo medicado por más de dos décadas.
Ha poco, su estado desmejoró considerablemente, pues su corazón ya no tenía fuerzas. Esto lo llevó a ser internado y colocado primero en la lista de espera para un trasplante cardíaco hace 20 días.
UN CORAZÓN LLEGÓ EN TIEMPO RÉCORD: QUIÉN ES OSVALDO, EL CORDOBÉS TRASPLANTADO
El momento decisivo llegó en la medianoche del sábado, cuando su esposa, Raquel Alderete, recibió la noticia: había un corazón disponible. La emoción, mezclada con nerviosismo, invadió a la familia ante la inminencia del procedimiento que tanto aguardaban. El órgano llegó a la capital cordobesa en un vuelo que aterrizó en el Aeropuerto Taravella.
Ante la urgencia del caso, se desplegó un operativo de traslado. Una empresa de ambulancias alertó a la fuerza policial para solicitar colaboración con un cordón sanitario. Según detalló el comisario Walter Morelli, el pedido de apoyo se realizó a través del 911 el domingo pasadas las 16.30, diagramándose de inmediato un esquema con móviles del sector, motocicletas, personal de Policía Caminera y cámaras.
El objetivo era llevar el órgano rápidamente desde el aeropuerto hasta el Hospital Italiano. Un trayecto que habitualmente toma alrededor de 40 minutos fue completado en tan solo ocho minutos.
CÓMO SIGUE OSVALDO, QUE RECIBIÓ UN CORAZÓN EN TIEMPO RÉCORD
La operación de trasplante se llevó a cabo el mismo domingo. Actualmente, Osvaldo se encuentra en terapia intensiva, aislado para evitar cualquier riesgo de infección. Los primeros signos de recuperación son alentadores: ya abrió los ojos y movió las manos, lo cual representa una enorme alegría para sus seres queridos.
Raquel Alderete expresó su profunda gratitud a la familia del donante, a quienes no conocen por ley. Les transmitió un mensaje de agradecimiento inmenso, asegurándoles que ese corazón seguirá latiendo dentro de Osvaldo y que lo cuidarán con esmero.