Cómo hacer chipa en licuadora: la receta súper fácil y lista en solo 30 minutos

Esta versión de la clásica chipa se volvió viral en redes por su textura esponjosa, su sabor irresistible y porque se prepara en minutos con licuadora.

Cómo hacer chipa en licuadora: la receta súper fácil y lista en solo 30 minutos
Cómo hacer chipa en licuadora: la receta súper fácil y lista en solo 30 minutos

Edgardo Ríos, conocido en TikTok como @mambrunense, compartió su receta de chipa matera y conquistó a miles de usuarios. “No es una torta matera, es una chipa matera”, aclara entre risas en su video, que ya suma miles de reproducciones. Y no exagera: el resultado es un panificado dorado por fuera, húmedo por dentro y con mucho, pero mucho queso.

Lo mejor es que se hace con ingredientes simples y sin necesidad de amasar. Solo necesitás una licuadora, un molde y 20 minutos de horno para tener lista esta delicia perfecta para compartir en casa.

Así queda la chipa matera.
Así queda la chipa matera.

Qué ingredientes se necesitan para hacer la chipa matera

  • 3 huevos
  • 200 ml de leche
  • 100 g de manteca derretida
  • ½ taza de harina de maíz paraguaya (no polenta)
  • 2 tazas de fécula de mandioca (unos 250 g)
  • 1 cucharadita colmada de sal
  • 300 g de queso semiduro (por salut, criollo o pategás)
  • 1 cucharada de anís (opcional)
Esta receta es la definitiva para los fanáticos del queso.
Esta receta es la definitiva para los fanáticos del queso.

Paso a paso, cómo preparar la chipa matera

  1. En la licuadora, colocá la leche, los huevos, la manteca derretida y la sal.
  2. Agregá la harina de maíz y la fécula de mandioca. Procesá hasta lograr una mezcla espesa pero fluida.
  3. Incorporá el queso rallado o en cubitos y mezclá nuevamente.
  4. Enmantecá un molde tipo savarín o de bizcochuelo de 24 cm y espolvoreá con un poco de harina de maíz.
  5. Verté la mezcla y, si querés, sumá unas semillitas de anís en el centro.
  6. Espolvoreá con un poco más de queso por encima para lograr una costra dorada.
  7. Llevá al horno fuerte, precalentado a 200 °C, durante 20 minutos o hasta que esté dorada y se despegue de los bordes.

Al desmoldarla, vas a notar que se despega fácil y mantiene ese aroma irresistible a queso fundido. Edgardo lo resume mejor que nadie: “Hacelo y después contame si valió la pena”. Una receta simple, práctica y con ese toque casero que siempre conquista el mate de la tarde.