En la actualidad, se han popularizado numerosas prácticas poco convencionales para atraer la prosperidad y la buena vibra. Una gran parte de estos ritos o métodos tienen su origen en tradiciones milenarias de diversas culturas o religiones. Entre ellos se encuentra el Feng Shui.
De acuerdo con esta doctrina, incorporar orégano en la cama y otras áreas del hogar puede producir una transformación positiva en la existencia de las personas. El motivo detrás de esta peculiar recomendación es su capacidad para atraer la prosperidad, el amor y la energía positiva.

El Feng Shui, una antigua filosofía oriental, se dedica a analizar el flujo energético y a armonizar los ambientes físicos. A pesar de que sus consejos pueden parecer extraños, se enfocan en fomentar la abundancia y mejorar las vibraciones, lo que puede contribuir a una vida más dichosa.
El motivo por el que debés colocar orégano en la cama, según el Feng Shui
Para esta cultura, el mundo está atravesado por un “chi”, un flujo de energía constante. El propósito del Feng Shui es, a través de la disposición y orientación de los objetos, la presencia de plantas y la iluminación, así como otros ajustes en los espacios físicos, conseguir que este “chi” sea positivo y atraiga prosperidad, alegría y afecto.
Sin embargo, el “chi” también se divide en una parte beneficiosa y otra perjudicial, representadas por la conocida figura del ying y el yang. Aunque ambas energías coexisten en el flujo, esta filosofía oriental busca, con sus recomendaciones y principios, que el “chi” positivo sea el que prevalezca en la vida cotidiana.

Se considera que la planta de orégano no solo ahuyenta las malas vibraciones y atrae las buenas, sino que su uso en el hogar también favorece la llegada de personas más positivas a nuestra vida. Además, la cama no es el único sitio clave para ubicarla.
Al colocar una rama de orégano cerca de la cama, se puede fomentar el amor y la calidez en una relación. Si se sitúa en la entrada de la casa, sirve para disipar las malas energías y sanear el ambiente. Y en la cocina, se utiliza para atraer la suerte y la abundancia económica.