Amazon Web Services aseguró que la caída masiva en su servicio de computación en la nube quedó resuelta este lunes por la noche, después de que una falla interrumpiera el funcionamiento de decenas de servicios en el mundo entero.
Todos los países, incluido Argentina, vieron como una amplia gama de servicios en línea, como redes sociales, videojuegos, entrega de comida, plataformas de streaming y billeteras virtuales dejaron de funcionar por horas.
La interrupción de varias horas y la exasperación que causó sirvieron como recordatorio de que la sociedad del siglo XXI depende cada vez más de apenas un puñado de empresas para gran parte de su tecnología de internet, la cual parece funcionar de manera confiable hasta que repentinamente se viene abajo.
Aproximadamente tres horas después de que comenzó la interrupción en la mañana del lunes, Amazon Web Services (AWS) avisó que estaba comenzando a resolver el problema, pero no fue sino hasta las 6 de la tarde (hora del este de Estados Unidos), que “los servicios volvieron a las operaciones normales”, según indicó Amazon en su sitio web de AWS donde rastrea las interrupciones.
¿Puede haber más fallas?
El experto en ciberseguridad Mike Chapple explicó que “un proceso de recuperación lento y accidentado” es “completamente normal”. Esto significa que, en las próximas horas, mientras los ingenieros implementan soluciones en toda la infraestructura de computación en la nube, “el proceso podría desencadenar interrupciones menores”.
“Es similar a lo que sucede después de un gran apagón: a medida que una ciudad va recuperando la luz, algunos vecindarios podrían experimentar fallas intermitentes mientras las cuadrillas terminan las reparaciones”, declaró Chapple, profesor de tecnología de la información en el Mendoza College of Business de la Universidad de Notre Dame.
¿A qué se debió la falla?
Amazon atribuye afectación a su sistema de nombres de dominio, un esquema que convierte direcciones web en direcciones IP, que son designaciones numéricas que identifican ubicaciones en internet. Esas direcciones permiten que los sitios web y aplicaciones se carguen en dispositivos conectados a internet.