Lomas de Zamora amaneció con una noticia que sacudió profundamente a toda la comunidad. En una casa ubicada en la calle Díaz Vélez al 300, casi esquina Loria, un niño de 8 años, Enzo Joaquín, fue hallado sin vida sobre la cama matrimonial del domicilio. Minutos antes, su madre había recibido un mensaje por WhatsApp que cambiaría su vida para siempre.
“Hoy te vas, pero te vas sin nada”. Esa fue la frase que escribió Alejandro Javier Ruffo, padre del menor, a su esposa, Natalia Ciak, quien había decidido separarse ese mismo martes y abandonar la vivienda junto a su hijo, según A24. La amenaza, interpretada hoy como una macabra advertencia, desencadenó una reacción desesperada de la mujer, que acudió al lugar con ayuda de una vecina y de la policía.
La horrible escena que se encontraron las autoridades
Cuando las autoridades ingresaron a la casa, la escena era dramática. Ruffo, de 52 años, yacía en la planta baja con una puñalada autoinfligida en el abdomen, rodeado de sangre. En la habitación principal del primer piso, el pequeño Enzo ya no tenía signos vitales. Según confirmaron fuentes judiciales al diario Clarín, el niño fue asfixiado con una almohada.
El hombre fue trasladado de urgencia al Hospital Gandulfo, donde permanece internado en terapia intensiva y bajo custodia policial. La fiscal Fabiola Juanatey, a cargo de la UFI N°2 de Lomas de Zamora, caratuló la causa como “homicidio agravado por el vínculo”. En caso de ser hallado responsable, Ruffo podría enfrentar prisión perpetua.
El entorno y el impacto vecinal
El hecho se produjo en un complejo de viviendas tipo PH, muy cercano a la estación de tren de la línea Roca. La tranquilidad habitual del barrio se vio interrumpida por la llegada de patrulleros, ambulancias y peritos de la Policía Científica.
Vecinos y vecinas manifestaron su profundo dolor ante lo ocurrido. “Al nene lo veía siempre jugando a la pelota o en su monopatín. Era un angelito”, expresó una mujer entre lágrimas. Otro testimonio destacó lo unidos que parecían: “Siempre pasaban por mi casa. Se los notaba muy cariñosos”.
Ruffo trabajaba como preceptor en el colegio trilingüe Westminster de Banfield, propiedad de su familia. También había estado vinculado a la Municipalidad de Lomas de Zamora y mantenía contacto con figuras de la política local. En sus redes sociales solía compartir imágenes junto a su hijo, muchas de ellas en la tribuna del Club Atlético Los Andes, equipo del cual eran fanáticos.
Un vínculo roto y una tragedia anunciada
Las primeras líneas de investigación apuntan a una posible motivación vinculada al final de la relación entre Ruffo y Ciak. La mujer había decidido irse de la casa con su hijo y ya contaba con un nuevo lugar donde vivir. Ese mismo martes planeaba concretar la mudanza, lo que, según los investigadores, podría haber detonado la violenta reacción del acusado.
La frase “Hoy te vas, pero te vas sin nada” fue considerada clave por los investigadores, quienes la interpretan como una amenaza directa al bienestar del niño. Cuando Ruffo se recupere, será sometido a pericias psiquiátricas para determinar su estado mental al momento del hecho y si comprendía la criminalidad de sus actos, de acuerdo con A24.
