A más de dos semanas de la desaparición de Pedro Kreder y Juana Morales, una pareja de jubilados de Chubut, la familia aportó un dato clave que podría ayudar a reconstruir sus últimos movimientos.
Gabriela Kreder, hija del hombre, confirmó que el último registro conocido de la camioneta en la que viajaban fue en Caleta Córdova, una pequeña localidad costera ubicada al norte de Comodoro Rivadavia. Ese sería el último punto donde fueron vistos antes de perder todo contacto.
La declaración de la hija
“La camioneta no llegó por sus propios medios hasta donde fue hallada. Ellos no estaban al volante”, aseguró Gabriela en declaraciones a medios locales, lo que abre nuevas hipótesis sobre lo ocurrido.
El hallazgo del vehículo, días atrás, había generado más interrogantes que respuestas. Según las autoridades, no se detectaron signos de violencia visibles, aunque los investigadores trabajan sobre distintas líneas para determinar cómo terminó allí y qué pasó con la pareja.

Desde la desaparición, familiares, vecinos y efectivos de seguridad participan de intensos rastrillajes por tierra y aire. La búsqueda se concentra en zonas rurales y caminos secundarios cercanos a Comodoro Rivadavia, mientras se analizan cámaras de seguridad y testimonios.
La escalofriante hipótesis sobre los jubilados desaparecidos: “Un robo que salió mal”
La incertidumbre y la preocupación por la pareja de jubilados desaparecidos no cesa, pero los investigadores comenzaron a atar cabos y despejar hipótesis para centrarse en una sospecha puntual. Así lo manifestó el jueves pasado, el ministro de Seguridad y Justicia de Chubut, Héctor Iturrioz.
En diálogo con la prensa Iturrioz se refirió a la investigación y puso el foco en la principal hipótesis que manejan y sobre la cual pretenden orientar la investigación. Para el funcionario y las autoridades vinculadas se trató de “un delito que salió mal y terminó en homicidio”.
Yendo a términos más duros y profundos, Iturrioz mencionó: “Aparentemente fue un robo armado”. No obstante, remarcó que “los rastrillajes continúan” porque, en caso de que la lamentable suposición sea real, “los cadáveres deben aparecer”.
Sin embargo, otra de las líneas investigativas paralelas que también sostienen es la posibilidad de que “se hayan perdido”.






































