Los retos virales que circulan en redes muchas veces exceden los límites. Desde 2018 se puso de moda uno que ahora, varios años después, se hizo tendencia en España.
El reto de moda en cuestión obligó a cerrar más de 300 piscinas en ese país. ¿El motivo? La contaminación de sus aguas por heces humanas. Sí, el challenge consiste en, nada menos, que defecar en las piletas.
Los carteles y los videos que alertan sobre la presencia de “caca” inundaron las redes, como también los videos de que gente que se encontró con la para nada agradable sorpresa durante sus paseos veraniegos.
En qué consiste el reto viral
Los usuarios de redes están retándose para defecar en estas aguas. ¿El objetivo? Molestar al resto de las personas.
Sin embargo, a partir de esto lo único que se logró, además de poner en riesgo la salud de los usuarios, es forzar el cierre de unas 300 piscinas.
Sucede que cuando una piscina presenta heces debe cerrarse al público por 24 o 48 horas y someterse a un exhaustivo tratamiento que garantice la total eliminación de agentes contaminantes.
Los riesgos y consecuencias de “defecar en las piscinas”
Este problema se popularizó no bien entrado el verano en Europa. En vistas de que el suceso no cesaba los médicos debieron profundizar la información acerca de los riesgos que acarrea esta “broma” que no tiene nada de divertido.
Las heces transmiten miles de gérmenes, virus y bacterias. Uno de los riesgos más comunes para quienes tomen contacto con el agua contaminada es que podría ocasionarles una “enfermedad gastrointestinal”.
Los que más riesgos corren son los niños pequeños, que muchas veces no tienen el mismo control de un adulto a la hora de nadar, por lo que es muy común que traguen agua. También los guardavidas se arriesgan durante su tarea.
Entre las enfermedades que se pueden contraer están aquellas causadas por bacterias como E. coli, Salmonella, Shigella o parásitos como Giardia y Cryptosporidium. Los síntomas de estas infecciones pueden ir desde diarreas, vómitos y dolor abdominal hasta fiebre.
Además, si una persona con una herida o cicatriz reciente ingresa y tiene contacto con agua contaminada por heces también podría tener grandes complicaciones.