Gustavo Alejandro Bruzzone, apuntado como colaborador clave en una banda narco vinculada con el envío de un cargamento de 1.600 kg de cocaína desde Rosario, fue detenido en Haedo por el Departamento Federal de Investigaciones de la Policía Federal Argentina, con apoyo de la Dirección General de Operaciones Antidrogas de la Hidrovía del Paraná.
Bruzzone estaba en la lista de los diez prófugos más buscados del país. Fue sorprendido cuando visitaba a un familiar a bordo de su vehículo, un Peugeot 208, que fue incautado junto con su teléfono celular. Quedó detenido e incomunicado por orden del Juzgado Federal de Campana.
Su detención responde a su rol en la logística de la operación federal conocida como “Rosario‑Dubái”, que desmanteló el envío de cocaína oculta en bolsones de alimento balanceado para animales, con sellos especiales adheridos a los panes del estupefaciente.

La banda, liderada por José “Tano” Sofía, condenado a 11 años de prisión, intentó enviar 1.658 kg de cocaína desde Rosario hasta Dubái, con destino final en Europa. El operativo se desarrolló luego de una investigación de seis meses y allanamientos en galpones del barrio Empalme Graneros.
La cocaína estaba dentro de contenedores cargados con maíz y alimento balanceado, aprovechando la ruta de salida por la Hidrovía Paraná-Paraguay y coordinada por bandas internacionales, incluidas autoridades de la DEA.
En aquel megaoperativo se incautaron vehículos de alta gama, maquinaria para acondicionar la droga y armas de fuego, además de la sustancia valuada en más de 60 millones de dólares en el mercado europeo.

Con la captura de Bruzzone, las autoridades estiman que se desmanteló otro eslabón dentro de una estructura narco que operaba desde Rosario con alcance internacional. La detención reduce significativamente la capacidad logística de la banda.