Trabajadores rurales de Armstrong y Cañada de Gómez, en el sur de Santa Fe, reportaron el fin de semana pasado el hallazgo de objetos metálicos de origen desconocido en sus campos. Los elementos, similares a cápsulas recubiertas de un material negro, podrían tratarse de basura espacial, posiblemente restos de un cohete de SpaceX.

En Cañada de Gómez, uno de los objetos apareció cerca de la Escuela Rural “Campo Mosca”. El comodoro Rubén Lianza, director del Centro de Identificación Aeroespacial (CIAE) de la Fuerza Aérea Argentina, se trasladó al lugar junto a bomberos y personal de Protección Civil. Tras la inspección, se confirmó que se trata de un residuo espacial sin actividad de radiación.
A unos 20 kilómetros, en Armstrong, un productor rural encontró un objeto similar atascado en el sinfín de su cosechadora. El hombre destacó la resistencia del material, describiéndolo como “irrompible”.
Los objetos miden aproximadamente 80 centímetros de largo por 30 de diámetro, pesan unos 2 kilogramos y estarían compuestos de materiales como fibra de carbono y titanio. A pesar del impacto, dejaron apenas una huella superficial en el terreno.

La principal hipótesis indica que se trataría de recipientes a presión con revestimiento compuesto (COPV, por sus siglas en inglés), componentes utilizados en vuelos espaciales. Un objeto similar fue hallado en Polonia en febrero pasado.
Las autoridades continúan investigando el origen de estos objetos y su posible vinculación con misiones espaciales recientes.