Autoridades provinciales recorrieron los cimientos del primer Cabildo, la antigua plaza y las calles donde nació San Miguel de Tucumán en 1565, en la localidad de Ibatin. El ministro de Interior, Dario Monteros, junto a miembros del gabinete provincial, legisladores, intendentes, concejales, alumnos y docentes de distintos puntos de la provincia, participaron de la ceremonia. Destacó Monteros que “no fuimos a mirar ruinas. Fuimos a revivir nuestra identidad como pueblo, a reafirmar que el interior no es un margen: es el origen y el motor de esta provincia. Que los jóvenes conozcan Ibatín es fundamental. Allí están las raíces de lo que somos: un pueblo que desde el interior se organizó, tomó decisiones, construyó instituciones y nunca renunció a crecer. Creemos en el valor de la historia viva, en esa que se enseña caminando el territorio, con la voz de los docentes, con la emoción de los chicos y con el compromiso de un Estado presente”.
Remarcó que “invertir en memoria, en educación y en identidad también es hacer obra pública. Porque no hay futuro sin conciencia de lo que fuimos y sin amor por la tierra que nos vio nacer.
Desde Ibatín, reafirmamos nuestra decisión: seguir gobernando con el corazón puesto en el interior tucumano y con la mirada firme en el futuro que merecen nuestras comunidades”.