Nati Jota se ganó un lugar especial en el corazón del público y supo construir, con el tiempo, una comunidad fiel que la sigue en cada paso que da en redes sociales. ¿El secreto? Su estilo auténtico, su sentido del humor tan propio y esa manera natural que tiene de decir lo que piensa sin filtro. En plataformas como Instagram, la periodista se muestra tal cual es: cercana, divertida y sin miedo al qué dirán. Comparte desde momentos íntimos de su día a día hasta situaciones laborales, viajes, reflexiones y ocurrencias que despiertan empatía y risas por igual.

En esta oportunidad, la periodista conquistó las redes con su look para ir al gym: top negro y calza corta en color gris, bien al cuerpo. “Entrenar combinada es de gila”, escribió junto a la foto que subió en sus historias, plantando la polémica con las que eligen un total look monocromático a la hora de entrenar.

Nati Jota se sinceró en redes: “Twitter, mi cuna y mi verdugo”
Nati Jota volvió a hacer lo que mejor sabe: abrirse con total sinceridad frente a sus seguidores y poner en palabras lo que muchos sienten pero no siempre dicen. Esta vez, usó sus historias de Instagram para compartir una reflexión profunda sobre el lugar que ocupa la tecnología en su vida cotidiana.

En medio de un viaje de descanso, confesó que ni siquiera en vacaciones logra desconectarse del todo. “Intenté simplemente contemplar, pero a los minutos ya estaba con el celular o charlando con alguien”, relató. Una postal bastante común para toda una generación que vive hiperestimulada.

En ese mismo mensaje, Nati habló sin vueltas del amor y odio que le genera el mundo digital. Por un lado, lo reconoce como el motor de su carrera, el lugar que le dio voz y le permitió conectar con miles de personas. Pero, al mismo tiempo, también le pesa la toxicidad de algunas plataformas y la necesidad constante de estar produciendo contenido. “A veces detesto Twitter por lo nocivo que puede ser, pero si no fuera por ahí, tal vez hoy estaría en otro lugar. Y mi vida me gusta, aunque sea bastante quejosa”, escribió.